Editorial

Tenemos Que Ver nace de la indignación e impotencia por vivir en un país que elige la impunidad. En 2010, luego que la sociedad uruguaya por segunda vez decidiera no juzgar a los asesinos, torturadores, genocidas, violadores y ladrones que en nombre del Estado hicieron cualquier tipo de barbarie, se encontraron dos amigos: Yama y Seba que motivados por la bronca y el deseo de hacer un aporte desde la cultura se proponen hacer un Festival que promueva el debate y la reflexión en torno a los derechos humanos. Para ello invitan a Sol y entre los tres comienzan a tocar puertas en busca de apoyos. Pasó un tiempo hasta que llegara a mis manos el proyecto, Cotidiano se había comprometido a apoyarles y me acercaba el proyecto para que pensara en la gráfica. 

La idea de hacer un Festival de Cine y Derechos Humanos me enamoró en el primer instante, ya que reunía en un único evento la militancia social y el arte. Es así que comenzamos a darle forma a la idea, buscando crear un espacio que nos identificara, una imagen, una estructura. En 2011 le pusimos nombre e hicimos nuestra primera actividad que fue el 6 de diciembre y consistió en una muestra de cine afro. Una actividad que comenzó en las calles recorriendo actividades culturales, hablando con el colectivo afro y haciendo una propuesta de comunicación desde lo participativo. La proyección contó con un largometraje y dos cortometrajes uruguayos, así como música y otras actividades. Fue una noche maravillosa en la que asistieron 250 personas. Ahí nacimos como Festival y comenzamos entonces a proyectarlo todo para nuestra primera edición en junio de 2012.

En estos 10 años hemos abordado desde este espacio una gran variedad de temáticas y hemos contado con una gran cantidad de invitades y actividades. Han participado miles de niños, niñas y adolescentes en el Concurso de 1 minuto 1 derecho y en las muestra de cine para este público. Hemos recibido muchas devoluciones maravillosas, que le dan sentido a todo el esfuerzo que implica en Uruguay hacer un proyecto cultural y social sin fines de lucro, que no cuenta con una vía propia de financiación. Hemos ido al liceo, a cárceles, a centros de reclusión de menores, a centros culturales del interior del país y hemos recorrido casi el mundo entero a través de la pantalla.

Hoy nos encontramos nuevamente reafirmando la necesidad de este espacio, cuando avanza la reacción por las conquistas en derechos, cuando los relatos comienzan a ponerse en cuestionamiento, cuando las verdades se ponen en disputa, cuando el Estado se hace ausente ante la crisis económica, la falta de empleo y la pobreza. Cuando el facismo gana terreno en todos los frentes y avanzan los proyectos neoliberales y conservadores. Hoy, con más fuerza sentimos que debemos pensar juntes, encontrarnos y buscar medios que posibiliten a todes una vida plena, que contemple las necesidades y que construya desde la diferencia y en base a una cultura de derechos. Elegimos hacerlo desde el arte y el cine, apelando a promover empatía a través de la sensibilidad. 

La pandemia de COVID-19 ha provocado una crisis económica que ha afectado profundamente a grandes poblaciones, incrementado la pobreza y la desigualdad social. Ante esta realidad y la ausencia estatal, el pueblo se ha hecho presente a través de la acción y solidaridad desde lo colectivo. En esta edición ponemos el foco en las presencias y ausencias, porque cuando el Estado está ausente, surge la solidaridad popular para apalear el hambre y las necesidades básicas insatisfechas. Pero son los Estados, responsables de garantizar los derechos humanos, los que deben hacer frente a las necesidades de los pueblos. Por lo tanto, este Festival también es un reclamo, un grito que clama acción, ya no de los pueblos, sino también de los gobiernos.
La programación del 10mo. Tenemos Que Ver está dividida en cuatro ejes, en los mismos abordaremos las marcas de la ausencia Estatal, las democracias en disputa, los movimientos sociales encabezados por les jóvenes y las mujeres encabezando las luchas. Esperamos acercar las realidades de otros países y reflexionar juntes. Les deseamos un fructífero Festival y les esperamos en las salas, porque ante la realidad que se encuentra ante nosotres todes Tenemos Que Ver y esta edición, una vez más, les invitamos a la ACCIÓN.